5 reglas de oro para cuidar las plantas suculentas o cactus
Nos gustan los cactus o plantas suculentas porque crecen con bastante facilidad. Pero nos gustan especialmente por su lado particularmente decorativo. Ponemos estas plantas en los estantes, en el escritorio o en el filo de la ventana para mejorar la decoración interior. ¡Incluso es posible ensamblar varias suculentas en el mismo envase o recipiente para generar un efecto muy original! Pero, ¿qué debes saber sobre el mantenimiento y cuidado de estas plantas?
El sol
Las suculentas provienen de países cálidos, por lo que, aman y necesitan especialmente el sol. Si quieres que una planta suculenta florezca bien, debes colocarla en un lugar soleado. Colócala delante de un ventana o en el balcón. Lo principal en todos los casos es permitirle recibir suficiente sol.
Agua
El agua también es crucial para el correcto desarrollo de las plantas suculentas o el cactus. Sin embargo, estas plantas no necesitan mucho suministro de agua. Solo recuerda, humedecer la planta cuando el suelo esté seco. Te sugerimos, rejar este tipo de planta una vez al día durante el verano. El resto del año solo riegalas una vez por semana.
El calor
A las suculentas también les gusta el calor, dado que ellas provienen de países soleados y calurosos. Deben colocarse en un lugar cálido. En invierno, es mejor dejarlas dentro de la casa. Pero nunca olvides dejar que disfruten del sol, especialmente entre 10 de la mañana y las 4 p.m.
Drenaje
Estas plantas también necesitan un buen sistema de drenaje. En términos generales, necesitan una maceta que tenga un orificio de drenaje que permita que el agua salga con facilidad. Además debes de forrar el fondo de la maceta con pequeñas piedras y luego en otra capa, coloca la tierra. Esta disposición de las diferentes capas del suelo permitirá un mejor drenaje del agua a la hora de realizar el riego.
Limpieza de hojas
Si tus suculentas o cactus se llenan de polvo, deberías limpiarlas sistemáticamente. De hecho, a estas plantas le encanta estar limpias, ¡les gusta que las mimen! Para limpiarlas, sin embargo, ten mucho cuidado, ya que pueden perder fácilmente sus hojas. Por ejemplo, puedes usar un plumero para limpiar las hojas, hazlo hoja por hoja.
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